Las cosas como son: el bajo es uno de los pocos instrumentos musicales que está presente en prácticamente cualquier tipo de ensamble y agrupación musical.
¿Te habías dado cuenta?
En casi todos los estilos de música tradicional, en el rock, funk, reggae, música latina, jazz, folklore del mundo e incluso en la música clásica siempre está presente.
Con esta dominación casi total del panorama musical, resulta de esperar que existan muchos tipos de bajo.
Pero… ¿puedes decir que los conoces todos?
Pongamos a prueba tus conocimientos de bajos con estas 8 variedades.
Tipos de bajos
1. Bajo eléctrico
El bajo eléctrico es uno de los más versátiles y conocidos en la música occidental.
Presente en géneros tan diferentes entre sí como rock, ranchera, jazz o salsa, este tipo de bajo destaca por su adaptabilidad.
También puede ser tan complejo dependiendo del estilo que se toque o del bajista, claro. Lo hay de cuatro cuerdas, 5, 6 o más… y con cada cuerda que agregas aumentan las capacidades del bajo y su complejidad melódica, técnica y musical.
Sin embargo, los bajos eléctricos pueden ser de los instrumentos más subestimados y de menor reconocimiento, al menos por parte de los fans y oyentes menos expertos.
El tema es que cuando es muy simple, a veces puede pasar desapercibido ante los oídos menos experimentados. No obstante, nos puede dejar verdaderas muestras de virtuosismo y proeza musical.
2. Bajo acústico
El bajo acústico es menos popular que el eléctrico, mayormente por su menor capacidad sonora y, por ende, menor versatilidad.
Es que, mientras que al bajo eléctrico lo conectas a un ampli y lo escuchas como sea, el acústico no producirá tanto volumen y además necesita micro y altavoz aparte.
Claro, para presentaciones en acústico como conciertos solista o con pocos instrumentos en tarima, son geniales. Por ejemplo, si le pones una guitarra eléctrica al lado con distorsión, no te enterarás del bajo acústico.
Su caja de resonancia abierta le da un tono orgánico muy agradable y romántico. De hecho, tiene un sonido bastante similar al del contrabajo.
Júntalo con una guitarra acústica y tendrás tu dúo country acústico.
3. Bajo electroacústico
El bajo electroacústico reúne lo mejor de los dos tipos de bajos anteriores: la parte acústica con su suave sonido orgánico, pero con la facilidad de que lo puedes conectar al ampli en cualquier y escucharlo con mayor facilidad.
De hecho, hoy en día es bastante más común ver bajos electroacústicos en lugar de bajos acústicos.
Claro, al final del día pueden ofrecer la misma sonoridad acústica sin amplificador de bajo, pero con la versatilidad que le da la conectividad.
Ten en cuenta también que, aunque los enchufes a un amplificador de bajo eléctrico, no suenan de la misma forma.
Para algunos puede ser algo negativo, pero realmente allí reside parte de su magia y atractivo.
4. Bajo sin trastes
El bajo sin trastes es un tipo de bajo bastante especial. Como su nombre indica, son bajos que no llevan trastes, es decir, las piezas rectas de metal que dividen el mástil en diferentes secciones para dar lugar a las diferentes notas.
Esto lo hace bastante más difícil de tocar que un bajo tradicional.
¿Por qué? Porque el bajista necesitará muchísima precisión para dar en las notas del bajo exactas, con la afinación correcta.
Sin embargo, ¡suena increíble!
La falta de trastes hace que el sonido sea totalmente distinto y además permite tocar microtonos, que son esas pequeñas variaciones que hay entre una nota y otra. Por ejemplo, entre Fa y Fa# hay microtonos. Al eliminar los trastes, puedes tocar cualquier nota entre Fa y Fa#.
Musicalmente, te abre muchísimas posibilidades.
5. Bajo de escala larga
Los bajos, así como las guitarras, también tienen unas escalas ya definidas y que se refieren directamente a la distancia entre el puente y la cejilla superior, al comienzo del mástil.
¿En qué te afecta? Pues, la escala del bajo hará variar el tono y la facilidad para tocar el instrumento.
Generalmente, las personas altas, con extremidades grandes o de dedos y manos grandes se sentirán más cómodos en los bajos de escala larga. Esto es porque el espacio entre las cuerdas del bajo eléctrico o acústico será mayor, dando más lugar para maniobrar y acomodar las manos.
Los bajos de escala larga son aquellos con una distancia de 86 cm del puente a la cejilla. El Fender Jazz Bass es uno de los más populares del mundo en esta categoría.
6. Bajo de escala corta
En el otro lado del espectro tenemos a los bajos de escala corta.
Estos bajos tienen una distancia de 78 cm o menos entre la cejilla y el puente y, aunque no son tan populares como los bajos de escala larga, debo decir que suenan muy bien. Tienen mucha potencia y se les puede sacar mucho jugo.
Contrario a lo que sucede con los de escala larga, estos modelos más cortos son ideales para personas de baja estatura o con manos y dedos pequeños.
Si alguna vez has tocado un bajo y has sentido que se te quedaba grande, muy seguramente sea porque estabas tocando una escala mayor de lo que necesitas según tu estatura o medidas.
Otra ventaja de los bajos de escala corta es que puedes sacarles otros armónicos diferentes y que el menor espacio entre las cuerdas permite tocar con mayor rapidez y ejecutar técnicas que los bajos más grandes no permiten con tanta comodidad.
7. Bajo contrabajo
El contrabajo es un estandarte de la música clásica.
Sin embargo, también es muy utilizado en otros géneros como el jazz, la balada y en presentaciones en vivo y en acústico.
Por su gran tamaño -solo la caja de resonancia puede medir 1.4 metros-, no es precisamente el bajo más cómodo para transportar. Sin embargo, el sonido merece la pena, con una potencia y presencia más que imponentes.
Este tipo de bajo se puede tocar directamente con los dedos o con arco.
8. Bajo de cuerpo hueco o hollowbody
El hollowbody es un tipo de bajo que tiene un cuerpo hueco, similar al de la guitarra acústica.
Ahora, no son bajos acústicos, sino bajos eléctricos cuyo cuerpo es hueco, no sólido. Por ende, tienen una sonoridad bastante potente, pero además se acompañan de las pastillas y conectividad de los bajos eléctricos.
Es un ganar-ganar.
Dentro de esta categoría también existen los semi hollow. Son bajos a medio camino entre el hollowbody y uno de cuerpo sólido. Pero con un sonido más cálido y orgánico.
Conéctalo a un amplificador de bajo eléctrico y le podrás sacar todo el jugo posible.
Soy un apasionado de la música como tú. Me llamo Daniel y soy músico profesional, de formación clásica y corazón rockero. Llevo 13 años tocando la guitarra y siempre coqueteo con nuevos instrumentos, investigo sobre ellos y descubro algo nuevo. Me encanta conseguir ofertas y compartir todo lo que voy aprendiendo en el camino.